No sé ni lo que sientes, ni lo que piensas, solo sé que me siento que jugaste conmigo a un "ahora sí" "ahora no", ese juego en el que tú vienes y tonteas descaradamente para luego ignorarme y hacerme sentir como si no existiera...
Llevaba un mes olvidándote, es cierto que me acordaba de ti muchas veces, no lo voy a negar, pero conseguí convertirte en un recuerdo lejano, inolvidable eso sí, porque quieras o no me ayudaste en una etapa de mi vida, y por ello te estoy agradecida. Pero hoy tuviste que revolver de nuevo mi mundo, el cual estaba ordenadito (no del todo, todo hay que decirlo); hoy te volví a ver y mi corazón fue a mil por horas en menos de un segundo, ni el coche más rápido del mundo superaría la velocidad de mis pulsaciones; hoy volviste a entrar en mi vida con esa estúpida sonrisita que tan loca me vuelve... ¿por qué ahora que me voy?
Fue divertido mientras duro el juego, a veces no lo era tanto, pero cuando los dos estábamos en la misma fase, eso era una bomba explosiva de felicidad; una simple sonrisa tuya o una mirada coqueta podía alegrarme días, hasta que volvía a la realidad y veía que este juego era solo eso, un estúpido juego... Realmente no entiendo porque me dejé llevar por lo que empezó como un simple juego sin sentido, pero sin darme cuenta acabaste gustándome más de lo que yo quisiera admitir. Y era eso lo que temía: antes de conocerte, tenía mi vida "resuelta", mis ideas fijas y mis planes de futuro, y tuviste que aparecer con ese aire de chico desenfadado y aventurero, y desordenar mi mundo... Me hiciste cambiar mis planes y todo ¿para qué?
No me quejo, porque durante este año me alegraste los días cuando conseguía verte (que ilusa que me conformaba con tan solo verte); aunque tuviera un día penoso y triste, tú conseguías que el sol saliera e iluminara el resto de mi semana con la mayor intensidad posible; una sonrisa tuya provocaba que las pulsaciones de mi corazón se aceleraran a mil por hora, provocaba mil y una risas en mi alma, y daba igual el momento y el lugar, pensar en ti provocaba que la comisuras de mis labios se arquearan formando una sonrisa en mi cara... ¡incluso en mitad de los exámenes!; aún sonrío pensando en esos momentos que tan feliz me hacían...
...pero ese juego de miradas y sonrisas me terminó cansando, necesitaba aspirar a otro nivel y parecía que no ponías de tu parte, ahora yo lo dí todo, puse toda la carne en el asador (y eso que soy vegetariana ;D) y tú...simplemente has pasado de seguir con el juego que tú iniciaste. No sé si es que te acobardaste por estar suponiendo cuando ni siquiera sabías que es lo que yo quería, por suponer que yo iba a complicarte la vida...¿acaso crees que yo iba a estar complicando las cosas cuando me iba en menos de un mes?
No estoy dolida, ni siquiera me arrepiento, porque por mi parte no queda un "y si hubiera", no, gracias a ti me voy feliz y segura, como si hubiera ganado la medalla de oro en las olimpiadas o me hubiera tocado la lotería, y es que como te he dicho antes, me ayudaste a superar mis miedos, mi estúpida timidez que me impedía avanzar y continuar con mi camino.
Así que a día de hoy te digo que gracias por aparecer en mi vida, no sé si nos volveremos a ver en un futuro, ¿quién sabe?, no voy a mentirte y decirte que deseo no volver a verte porque hoy me has demostrado que no es así y que me gustaría verte cada mañana como los viejos tiempo.
Dicen que hay personas que aparecen en tu vida por un tiempo determinado por alguna razón y luego desaparecen... tal vez tu seas como una estrella fugaz, apareciste para ayudarme a empezar de nuevo y te esfumaste en menos de dos segundos...sea lo que sea, gracias por existir porque gracias a ti hoy soy una chica nueva.
P.D.: No sé si yo habré provocado algún sentimiento en tu mundo fuera de lo normal, pero aunque estoy casi segura de que nunca verás esta "carta" quiero que sepas que sin darte cuenta has cambiado mi mundo... a mejor =) Gracias!