Recuerdo el primer día que te vi, no duró más de diez minutos, pero ya había surgido algo entre nosotros aunque no eramos conscientes. Recuerdo las risas que inundaban aquella noche de primavera. Recuerdo que sin conocerte absolutamente de nada quería quedarme junto a ti, pero por alguna extraña razón me fui y no te volví a ver esa noche, ni muchas noches después. Es increíble como recordamos momentos que creíamos haber olvidado. Esa noche, ni tu ni yo sabíamos el error que estábamos cometiendo. Tú te fuiste y no volviste como me habías prometido, yo me fui cuando en realidad quería haberme ido contigo... apuesto que de habernos quedado, nuestra historia hubiera comenzado hace tres años. Pero tal vez no era el momento de enamorarnos... fue simplemente un instante que sin darnos cuenta significó algo. Ambos ese día teníamos ganas de una locura pero nos fuimos cada uno por su lado y el tiempo pasó.
Recuerdo la segunda vez que nos encontramos, el cumpleaños de la misma amiga que nos presentó la noche de primavera. Esta vez estuvimos mucho más rato en el mismo sitio, pero ese día yo estaba muy enfadada con el mundo y me encerré en mi misma, no sabía el error que cometía. Tú sin embargo te fijaste en mi, pero por alguna extraña razón no te atreviste a acercarte a mi... todo hubiera sido muy distinto si ese día nos hubiésemos dicho algo más que un simple "Hola". Yo no sabía que tenía delante de mis narices al amor de mi vida, si pudiera volver atrás se lo chivaría a esa chica del pasado, le diría que no fuera tan tonta y no dejara que un enfado tonto le alejara casi dos años de su alma gemela... pero ya es pasado, y yo ese día me fui a mi casa pensando que fue un día más, y tú te fuiste pensando en mi pero sin haberte atrevido a cometer la locura de hablarme. Que ciegos estábamos, pero tal vez ese tampoco era el momento...
Recuerdo, aunque esto fue por una foto, que coincidimos en la misma manifestación... a escasos metros estábamos el uno del otro, pero ese día ni nos vimos...
Pero, sin duda el día que más recuerdo fue el día del aeropuerto, el día que nos dimos cuenta que tú y yo estábamos hecho el uno para el otro... no entendíamos cómo podíamos sentir eso sin apenas conocernos... puede que nosotros no, pero nuestras almas si, ellas se reconocieron. Ese día marcó el antes y el después. Ese día no nos fuimos cada uno por nuestra cuenta, ese día decidimos quedarnos para siempre... y aquí estamos, después de ocho meses de ese reencuentro, después de tantos años que el destino intentaba unirnos pero nosotros mirábamos para otro lado... aquí estamos, aprovechando cada segundo de nuestra vida juntos, y es que ya hemos pasado mucho tiempo alejados el uno del otro, es hora de disfrutar de nuestras locuras y aventuras...
Recuerdo cada instante a tu lado, porque hasta los días más insignificantes están llenos de significados por ti. Recuerdo cada abrazo, cada risa, cada mirada y cada "Te quiero". Recuerdo cada beso y cada susurro, cada locura y cada secreto. Recuerdo cada noche de verano y cada mañana a tu lado. Recuerdo cada uno de los momentos en los que tú hayas estado... y es que, querido mío, es imposible olvidar algún instante a tu lado...
En una pareja, lo importante son los los gestos cotidianos del día a día, los felices despertares, los besos de buenos días, mirarse a los ojos con ternura, las ganas de abrazarse, hablar de todo y más, hablar las cosas sin necesidad de discutir intentando ponerse en el lugar del otro, reírse mucho de todas las payasadas que hacemos cuando estamos enamorados, más y más abrazos inesperados que te recomponen todas las partes rotas, ver las estrellas juntos cada noche antes de acostarse y después. Besos,besos y mas besos. Cosas simples que nos hacen sentir únicos y especiales.
Hay alguien especial para cada uno de nosotros. A menudo, nos están destinados dos, tres y hasta cuatro
seres. Pertenecen a distintas generaciones y viajan a través de los mares, del tiempo y de las inmensidades
celestiales para encontrarse de nuevo con nosotros. Proceden del otro lado, del cielo. Su aspecto es diferente,
pero nuestro corazón los reconoce, porque los ha amado en los desiertos de Egipto iluminados por la luna y en
las antiguas llanuras de Mongolia. Con ellos hemos cabalgado en remotos ejércitos de guerreros y convivido en
las cuevas cubiertas de arena de la Antigüedad. Estamos unidos a ellos por los vínculos de la eternidad y nunca
nos abandonarán.
Es posible que nuestra mente diga: «Yo no te conozco.» Pero el corazón sí le conoce.
Él o ella nos cogen de la mano por primera vez y el recuerdo de ese contacto trasciende el tiempo y sacude
cada uno de los átomos de nuestro ser. Nos miran a los ojos y vemos a un alma gemela a través de los siglos.
El corazón nos da un vuelco. Se nos pone la piel de gallina. En ese momento todo lo demás pierde importancia.
Puede que no nos reconozcan a pesar de que finalmente nos hayamos encontrado otra vez, aunque nosotros
sí sepamos quiénes son. Sentimos el vínculo que nos une. También intuimos las posibilidades, el futuro. En
cambio, él o ella no lo ve. Sus temores, su intelecto y sus problemas forman un velo que cubre los ojos de su corazón,
y no nos permite que se lo retiremos. Sufrimos y nos lamentamos mientras el individuo en cuestión sigue
su camino. Tal es la fragilidad del destino.
La pasión que surge del mutuo reconocimiento supera la intensidad de cualquier erupción volcánica, y se
libera una tremenda energía. Podemos reconocer a nuestra alma gemela de un modo inmediato. Nos invade de
repente un sentimiento de familiaridad, sentimos que ya conocemos profundamente a esta persona, a un nivel
que rebasa los límites de la conciencia, con una profundidad que normalmente está reservada para los
miembros más íntimos de la familia. O incluso más profundamente. De una forma intuitiva, sabemos qué decir y
cuál será su reacción. Sentimos una seguridad y una confianza enormes, que no se adquieren en días, semanas
o meses.
Pero el reconocimiento se da casi siempre de un modo lento y sutil. La conciencia se ilumina a medida que el
velo se va descorriendo. No todo el mundo está preparado para percatarse al instante. Hay que esperar el
momento adecuado, y la persona que se da cuenta primero tiene que ser paciente.
Gracias a una mirada, un sueño, un recuerdo o un sentimiento podemos llegar a reconocer a un alma
gemela. Sus manos nos rozan o sus labios nos besan, y nuestra alma recobra vida súbitamente.
El contacto que nos despierta tal vez sea el de un hijo, hermano, pariente o amigo íntimo. O puede tratarse de nuestro ser amado que, a través de los siglos; llega a nosotros y nos besa de nuevo para
recordarnos que permaneceremos siempre juntos, hasta la eternidad.
Y cuando pienso que estoy superando lo insuperable me doy cuenta de que no es así, que solo eran días en lo que todo parecía mejorar, pero no, solo era una bonita farsa... cuando menos me lo espero los miedos vuelven con fuerza, como si esos días en los que la tranquilidad y la felicidad reinaban, el miedo hubiera estado recobrando energía para volver a gobernar mi mundo...
Un día me levanto y me siento feliz, siento que los días malos son ya cosa del pasado, que no volveré a sentirme insegura, que no volveré a desconfiar de nada ni de nadie, que puedo ser feliz plenamente... pero pum, aparecen los miedos y desequilibran mi imperio, ya no sé que hacer, la cabeza me da vueltas, constantemente torturándome, sin un minuto de descanso...
Es desesperante y doloroso sentirse así, la gente se limita a decirte: "tienes que dejar de sentirte así, eso te perjudicará a ti y a los que tienes a tu alrededor"... como si yo no supiera que mis miedos están destrozando todo lo que me rodea, como si no supiera que me estoy haciendo daño sin parar... pero no es fácil cambiar ese sentimiento de odio y soledad, de miedo y tristeza, de inseguridad y celos de un día para otro, llevo años luchando para salir de este bucle de inseguridad, para ser feliz... y aquí sigo, luchando sin parar... y sé que poco a poco lo consigo, sé que estoy haciendo progresos, pero cuando me vienen los días malos, los días en los que veo todo imposible, es mejor no estar cerca mía, la tortura se vuelve parte de mi, sin cesar un segundo, da igual lo que haga que no para esa voz interior que me dice que todo lo bueno que me está pasando no durará, que es todo mentira, que no puede ser todo tan perfecto, que todo va a salir mal, que no sirvo para nada, que soy una fracasada... al principio obvio todos estos pensamientos, pero cuando llevas día tras día escuchándolos dentro de ti, terminan afectando, y lo peor es que termino no sólo haciéndome daño a mi misma, sino a los que tengo a mi alrededor, a las personas que más quiero... y me aíslo, como si eso fuera a servir de algo... ¿pero qué puedo hacer? ya no sé me ocurre nada más... necesito un cambio, necesito que la paz y la felicidad reinen mi mundo y que la inseguridad desaparezca para siempre... y lo conseguiré, lo sé, pero queda un largo camino de lucha constante... al fin y al cabo, nadie dijo que fuera a ser fácil...
Hoy es uno de esos días en los que me levanté con energía, feliz y con ganas de comerme el mundo. Hoy me sentía con fuerzas... pero he vuelto a dejar que mis inseguridades y mis miedos me venzan una vez más... he vuelto a entrar en un bucle de autodestrucción, no soy capaz ni de mirarme en el espejo, ojalá pudiera alejarme de mi misma, pero no puedo, tengo esta pena de por vida... soy esclava de mis miedos, y eso es la peor condena que puede tener una persona, llego a un punto en el que la desesperación se apodera de mi y los peores sentimientos y pensamientos me devoran con furia... destrozando lentamente y con ensañamiento lo que queda de mi... llevo muchos años en este puto bucle y cuando pienso que por fin todo se ha acabado... vuelvo a entrar, y cada vez es peor, y cada vez sufro más... es desesperante... es jodidamente duro soportarme en estos momentos de odio extremo...
Estoy cansada, no puedo más con mis miedos, no puedo vivir con mis paranoias... pero no sé qué hacer... a veces me dan ganas de desaparecer del mundo, aunque sea por unos días, hasta que la tormenta desaparezca, hasta que mis mayores temores hayan desaparecido para siempre...
Me levanto, no pienso dejarme vencer por mi otro "yo", por el "yo" que me odia, por el "yo" que sabe darme donde más duele, por el "yo" que sabe como hacerme sufrir... no, no pienso dejar que mis inseguridades y miedos ganen esta batalla. Es mi vida, quiero ser feliz, y tengo la suerte de estar rodeada de seres que hacen que en mis días siempre haya una sonrisa y felicidad...pero cuando los miedos tocan a la puerta, me hundo y destrozo todo lo que haya a mi lado...
En esos momentos quiero apartar a quienes más quiero de mi lado... especialmente a ti. Odio esa persona en la que me convierto cuando los miedos afloran... y no quiero que lo sufras, porque puedo llegar a hacer mucho daño. Soy como el volcán apunto de estallar... y te advierto que la lava quema... y temo que queme lo nuestro, que queme lo que sientes por mi... Solo de pensar que te alejas de mi, me entra el pánico, no puedo imaginarme ni un segundo sin ti... pero a la vez te quiero apartar... te quiero, te quiero tanto que no quiero hacerte daño, y por eso quiero que te alejes...
Soy una persona difícil de tratar, cuando las paranoias y las inseguridades se apoderan de mi, dejo de ser la chica dulce y cariñosa que conoces... me convierto en un ser que destroza todo lo que hay a su alrededor... incluso a mi misma... Entro en un bucle de autodestrucción... y no quiero que mientras estoy en ese bucle, te haga daño... porque jamás me perdonaría que sufras por mi...
Pero ¿sabes qué? Adoro ese momento en el que estallo y te digo que te alejes, que saldrás mal parado si sigues conmigo y que te cansarás de mis rayaduras y de mis inseguridades.... ese momento en el que me miras y me dices que no te vas a marchar, que seguirás a mi lado, que sabes que hablan mis miedos y que junto a mi le daremos una patada a mis inseguridades...adoro ese momento en el que me abrazas tan fuerte que puedo notar como el miedo desaparece, como cobro fuerza para levantarme una vez más y luchar contra ese otro "yo" que tanto daño me hace...adoro que tú estés en mi vida... eres mi pilar... y no sé si es bueno o malo... porque aunque te quiero sin límites, temo que algún día decidas irte y no tenga un pilar en el que sujetarme, temo derrumbarme... da terror abrir el corazón a alguien, pero decidí a arriesgar y merece la pena... aunque mis miedos intenten hacerme creer lo contrario y tenga ganas de coger una maleta e irme lejos de aquí... miro tus ojos azules (y una pizca de verdes) y encuentro mi paz... y decido quedarme, porque sé que no existe lugar donde sea más feliz y me sienta más segura que a tu lado... has logrado que me sienta como en casa estando a 1012 Km de mi hogar... y eso no lo había conseguido nadie jamás....
"La tuya calma cualquier tormenta"
Pero a pesar de que eres el amor de mi vida, las inseguridades aparecen y hacen que me planteen todo.... me hacen sufrir dándome donde más duele, y me cuestiono un sin fin de cosas... no, no puedo decirte todo lo que me raya, no puedo contarte todos mis miedos... son demasiados... temo perderte, temo pensar que dejarás de amarme algún día, temo que te canses de mi y te marches, temo que no me quieras como yo a ti... temo despertarme y ver que nada de lo que tengo contigo es real...
Lo siento, pero me siento derrumbada, no puedo más... hoy no puedo más y no te tengo aquí... lo siento, pero solo quiero huir muy lejos de aquí, solo quiero que todo lo que siento desaparezca y dejar de sufrir... quiero dejar de estar en este bucle de autodestrucción... porque sé que esto te acabará cansando, sé que esto acabará con nosotros, con lo nuestro... y quiero cambiar, y quiero darle una patada a mis inseguridades, pero no sé, no puedo.... te necesito... ven, por favor...
Hoy me siento derrumbada, solo quiero dormir, que mañana mi otro "yo" haya desaparecido y pueda ser feliz... solo quiero verte y dormir a tu lado, quiero que me abraces con tanta fuerza que no haya hueco para mis miedos, quiero sentir tu pecho, notar tu corazón latir con ese ritmo tan peculiar... ese ritmo que me hace revivir aquel viernes... te quiero y prometo cambiar, prometo vencer mi otro "yo" y ser simplemente la chica dulce y cariñosa que conoces... y sé que lo conseguiré, porque por suerte no haces caso a mis miedos y no te alejas, te quedas abrazándome, hasta que la paz vuelve a inundar mi ser...
Prometo amarte eternamente .... prometo que jamás me alejaré de ti aunque mis miedos me impulsen a ello... Te lo prometo bichito =)
No puedo evitar ser feliz cuando estoy a tu lado, incluso cuando no lo estás... el mero hecho de saber que existes y que estás en mi vida, me hace inmensamente feliz... ¿Cómo no serlo si eres la persona más especial que existe?
Nunca imaginé que sabría lo que es el amor de verdad, ese amor que es incondicional, que no tiene límites, ese amor loco que solo dos locos como nosotros comprendemos. Nunca imaginé que sabría lo que es querer darlo todo por esa persona, verte feliz se ha vuelto mi prioridad... la más bonita de mis prioridades...
No sé cómo he estado ciega tanto tiempo, cómo te dejé escapar aquel 21 de septiembre de 2013... creo que esa niña de aquel entonces no era consciente que delante de sus narices estaba el amor de su vida... tantas veces que hemos coincidido y no nos hemos visto, tantas veces que hemos estado en el mismo sitio, con la misma gente pero en momentos diferentes, tantas veces que hemos estado a punto de coincidir, pero por alguna razón, no nos volvíamos a encontrar...
Me enfada que aquel 21 de septiembre no fuera capaz de ver más allá de mi mundo. Recuerdo ese día con algunas lagunas mentales, recuerdo que ese día estaba muy enfadada y decidí estar aislada antes que disfrutar del día y conocer gente nueva... si ese día hubiera sido capaz de dejar mis enfados de lado, te hubiera conocido en condiciones, y no sólo con un "Hola, yo soy Laura" y vuelta a mi mundo. Me hubiera gustado que ese día, mi yo del futuro me hubiera susurrado al oído que a quien tenía a mi lado era al amor de mi vida... pero no fue así.
Dicen que cuando una persona es para ti, el destino intenta uniros... pero que ya depende de la actitud de cada uno para aprovechar esa oportunidad. Yo, definitivamente, perdí esa oportunidad, pero, por suerte para mi, tú eras para mí, y yo para ti... y aquí estamos... un año, seis meses y siete días después nos volvimos a re-conocer. No me acordaba de ti, y por mucho que intente recordar... tengo una pésima memoria, y de ese día borré casi todos los recuerdos que tenía... ilusa de mi que pensó que solo fue un día más...
No vale la pena pensar por qué en aquel entonces ambos seguimos con nuestras vidas sin darnos cuenta que estábamos hechos el uno para el otro... es una pregunta sin respuesta. Lo que si vale la pena es el ahora... y vale la pena porque tú estás aquí, junto a mi... y eso me hace inmensamente feliz.
Dicen que las almas gemelas son dos almas que se reencuentran vida tras vida, todas las veces que se reencarnen volverán a reencontrarse y aunque no se acuerden de ninguna de sus vidas pasadas, tendrán la sensación de conocerse de toda la vida...y esa es la sensación que he tenido contigo desde que te reconocí... y aunque sea de locos, sé perfectamente que eres mi alma gemela, mi media mandarina o la otra persona que está al otro lado del hilo rojo... llámalo como quieras, eres el amor de mi vida, eres esa persona con la que me reencuentro vida tras vida. El destino nos ha intentado unir muchas veces, nuestra actitud no ayudó... el 28 de marzo por suerte nos dimos cuenta de que tú y yo no eramos simples desconocidos... tú y yo llevábamos mucho tiempo buscándonos... y por fin nos encontramos.
Estoy enamorada, no lo voy a negar... estoy perdidamente enamorada de ti...
Todavía recuerdo como me negué a reconocer que me gustabas, quería creer que sólo eramos amigos... buenos amigos... que ilusa era... no me daba cuenta que no me gustabas... sino que te quería con locura... de locos ¿no? ¡¡Pues adoro esta locura!! Y es que, adoro que nuestra historia sea tan atípica, tan alocada, tan fuera de lo normal... tan nosotros... adoro nuestro raro pero bonito comienzo, nuestra atípica historia, nuestro tiempo, nuestros secretos, nuestras miradas llenas de complicidad y amor, nuestras noches en la playa, nuestros días de billar, nuestros piques, nuestras locuras, nuestras canciones, nuestros momentos express, nuestras sorpresas, nuestros fines de semanas juntos, nuestras conversaciones hasta las tantas, nuestros paseos, nuestros rincones, nuestros viajes inesperados, nuestros sueños, nuestros planes de futuro... adoro todo y absolutamente todo lo que tiene que ver contigo, adoro cada segundo que pasa desde que te conozco... porque desde que has entrado en mi vida, la has cambiado para bien, has hecho que sepa lo que es vivir, que sepa disfrutar del día sea lunes o viernes, sean las dos de la tarde o sea la una de la madrugada, sea semana santa o sea época de exámenes... has hecho que viva... y eso es algo que jamás nadie había conseguido....
Antes sólo sobrevivía, tenía mis momentos de felicidad... pero desde que te conozco sé lo que es la felicidad plena, sé lo que es vivir... y adoro esta sensación... ¡y todo gracias a ti!
Vives en mi me mente y en mi corazón las 24 horas del día (menos cuando se cambia la hora... esos días estás en mi mente las 23 y 25 horas que dura el día), los 365 días del año (366 los años bisiestos)... vives en mi mente y en mi corazón cada segundo de mi vida... desde que me levanto hasta que me acuesto... hasta en mis sueños estás...
Cada mañana me levanto y sonrío... sonrío porque tengo al hombre más maravilloso, especial, único y mágico que haya pisado la faz de la Tierra... porque te tengo a ti... y eso es motivo de celebración cada mañana... sonrío porque sé que te veré y eso provoca que mil y una mariposas revoloteen en mi estómago desde primera hora de la mañana.... y solo deseo que llegue el momento de verte, el momento de poder abrazarte y volver a ver esa sonrisa... esa bonita sonrisa que me enamora...
Ojalá pudiera explicarte todo lo que siento por ti, todo lo que se me pasa por esta cabecita cuando pienso en ti (osea todo el tiempo)... pero no puedo... puedo intentar explicártelo y que te quede una ligera idea... una mínima idea de todo lo que siento... pero no puedo expresar todo lo que significas para mi porque nuestro amor es inefable... no se puede explicar...
Y me encantaría seguir escribiéndote cada pensamiento y todo lo que siento... pero me voy a reservar... tengo toda una vida por delante para darte sorpresas y expresarte lo que significas para mi... porque lo significas TODO para mí... pero ese todo abarca mucho y yo quiero dejarlo todo claro, sin ninguna duda... Te he dejado entrar en mi mundo sabiendo que será para siempre... no soy adivina, pero si bruja, y sé que tú y yo pasaremos toda una vida juntos... una vida tras otra, eternamente...
Te quiero bichito, incondicionalmente, sin límites, con locura, sólo como dos locos como nosotros sabemos =)
P.D.: Gracias por darme el placer de poder acompañarte en este hermoso camino al que llamamos vida... me siento privilegiada y te prometo que no te aburrirás, te prometo que estará llena de grandes experiencias, de risas y alegrías, de felicidad y amor, de pasión y locuras, de miradas, abrazos y besos... te prometo que este viaje será único y especial, mágico y inefable =)
Nunca te había buscado, y nunca espere que llegaras a mi
vida. ¡Joder, si ni siquiera sabía que existías! Y ahora me tienes aquí,
persiguiendo el rastro sideral que dejas al pasar, y masturbándome el corazón
sin poder dejar de pensar en ti.
Me encuentro en un estado de felicidad a todas horas, cada segundo desde que comenzamos a conocernos. Es raro ¿no? ¿Como puedes provocarme ese sentimiento cuando apenas hace unos días nos conocemos? Pero tienes ese efecto en mí, haces que me levante con una sonrisa en los labios y quiera hacer mil y una locuras a tu lado, haces que quiera comerme el mundo y aventurarme en mil y una idea alocadas.... No sé como lo has hecho, y para ser sincera, nadie lo había conseguido jamás...
Has hecho que me sienta libre y con ganas de vivir, has hecho que mis días estén lleno de alegrías y locuras, la melodía de la risa suena constantemente en mi corazón y en mi alma. Llevaba años metida en un pozo sin fondo, tenía más días grises que de colores, perdí la ilusión por la vida, quedaba cada vez menos esperanza, fingía felicidad ante el resto del mundo...pero tú has hecho que deje de fingir, tú has hecho que me sienta viva como nunca me había sentido, que me sienta capaz de cualquier cosa, que quiera irme hasta el fin del mundo contigo, porque tu compañía hace que yo me sienta realmente fantástica y extraordinariamente genial.
Estoy muy confundida, porque no quería conocer a nadie, era "feliz" sin complicarme con nadie, y justo apareciste tú,con tu locura y esos ojos que me matan cuando me miras, apareciste en el momento oportuno aunque lo quiera negar, y has hecho que realmente me sienta así, que me sienta feliz y con ganas de vivir!!
Has causado un fuerte impacto en mi vida, yo no estaba tan loca, o tal vez sí, pero no conocía a nadie con quien ser todo lo loca que realmente estoy. Solo los locos se entienden entre ellos, y, por fin, he conocido a alguien que tiene mi nivel de locura, y eso es simplemente requetegenial... y es que cuando estoy contigo me haces sentirme libre, puedo ser yo misma sin filtros, puedo decir mil y una estupidez y frases sin sentido, puedo proponer mil y una locuras, puedo bailar por la calle, puedo decir mil chistes malos que tú me entenderás y no te irás ni me juzgarás. Me siento cómoda junto a ti, me siento llena de vida y eso... ¡¡eso no lo había sentido jamás!!
Adoro los buenos días de cada mañana, las conversaciones a las tantas de la madrugada aunque los dos tengamos que madrugar, los planes que surgen de imprevisto, los chistes frikis y malos, los momentos en coche, las miradas fugaces, los ratos que pasamos juntos, las risas que suenan cada vez que hablo contigo, la complicidad y esa confianza que tan pronto ha surgido, los miles de planes de futuro, nuestras ganas de recorrernos el mundo, empezando por Granada, las maratones de películas pendientes, cómo me respetas y cómo eres conmigo, adoro que cuando esté triste, me hables y consigas alegrar mi día, y aunque lo odio, a la vez adoro estar en una nube de felicidad constantemente....¡Adoro haberte conocido! Y es que si lleguemos a algo más, o simplemente quedemos como muy buenos amigos, soy feliz, ¡porque lo que me haces sentir con tu compañía es mágico!
Por desgracia, me dejo llevar más por los miedos que por lo que realmente siento. Mis grandes enemigos... mi miedos... ojalá todo fuera más fácil y todo en mi mundo no se guiara por el miedo, pero, no es así. Temo a tantas cosas, que ya no me permito hacer lo que realmente mi corazón me pide. Mi mente me controla y no me deja en paz. Y aunque quiero, no puedo. Y, siendo totalmente sincera, no es por ti, es por mi, no es la típica frase que se suelta, es la pura verdad. Mi inestabilidad emocional y mis miedos no me dejan lanzarme al mar, y hacer todo lo que quiero hacer... Es realmente frustrante...en serio, ojalá pudiera explicarlo para que lo entendieras, pero, no puedo, es inexplicable hasta que punto mi miedo controla mi vida. Ojalá algún día consiga ganar esta batalla, y dejarme llevar sin culpabilidad de por medio, pero, de momento, no puedo...
No sé si algún día te diré todo esto que te escribo por aquí, sé que no lo vas a leer, este es mi escondite y no sé si estaré lista para mostrártelo alguna vez. Me encantaría decirte cómo has impactado en mi vida, y para bien...en serio, ¡¡has hecho que mi vida esté lleno de chispa y alegría!! Algún día espero ser capaz de decirte todo lo que siento, pero de momento, me lo reservo...
Pura química, así definiría todo esto... la forma en que me agarras la mano, cuando me abrazas, la manera en que me miras... produce mil reacciones químicas dentro de mi...
Y, ¿sabes qué es lo mejor? la inocencia de nuestra relación... esa forma en que me miras, me hablas, me abrazas y me agarras la mano, es tan bonita y dulce... que es inevitable que me gustes... Sí, no voy a negar más este sentimiento, porque mínimo me gustas...
Gracias por aparecer en mi vida, porque mínimo todo esto se queda en una gran amistad y ya eso vale un precio incalculable... y solo te conozco de hace once días, pero no miento cuando digo que mis mejores amigos a día de hoy lo supe desde el principio de conocernos, y es que hay cosas que simplemente se saben =)
"Los sueños están bien, pero es mejor estar contigo"
"Y bailar con la muerte no es buen plan, yo prefiero que me mates tú a bailar"
