Puede que la vida no sea fácil, que haya muchos contratiempos y muchas tormentas, pero cuando puedes luchar junto a un compañero de aventuras, todo mejora.
Hoy en día parece que a la sociedad le cuesta creer en el amor verdadero, cada vez parece todo más superficial y menos duradero. Yo, por suerte, he encontrado a mi mejor amigo pronto y, aunque la gente me dice que es imposible que sea para toda la vida, yo solo sé que no le voy a poner tiempo a esta amistad especial, sino solo disfrutar sin límites.
Hasta hace casi cuatro años, todo era caos en mi vida. Pero él apareció y puso patas arriba mi mundo: me enseñó a quererme, a disfrutar de los pequeños detalles, a luchar y, en definitiva, a ser feliz... plenamente feliz. Jamás había sentido tanta conexión con alguien como la sentí con él desde el primer día que lo conocí, conexión que ha ido aumentando con el paso de los años, haciendo que mi mundo se estabilizara y mis emociones no se desbordaran con cada piedra en el camino.
Cuando lees libros románticos y ves películas de esta temática, te haces ideas equivocadas sobre lo que es el amor de pareja. Y resulta que el amor en la vida real es mucho más auténtico y bonito. Porque lo que no te cuentan esas películas es que tener pareja es sinónimo de paz... de hogar. Cuando todo tu mundo se desborda, solo quieres ir a un sitio y es a donde esté esa personita para que te dé un abrazo y te diga que no estás sola. Cuando tienes una pareja, tienes un refugio. Es esa persona con la que quieres perderte cada fin de semana después del trabajo, es esa persona a la que le cuentas cada detalle de tu día, hasta las cosas aburridas porque así te nace hacerlo. Es esa persona con la que planeas un futuro que nunca sabes si llegará, pero soñar es gratis... es esa persona con la que compartes los triunfos y lloras las derrotas. Es esa persona que siempre te animará a seguir luchando y te hará sentir la persona más amada del mundo.
Está claro que en todas las relaciones de pareja hay crisis, es algo normal de las convivencias, igual que discutimos con nuestros hermanos o nuestros padres. Pero a pesar de los baches, se sabe cuando merece la pena luchar por esa relación. Y es que lo vives, sientes que no quieres a nadie más a tu lado, ni cuando la cosa se pone fea. Sientes que sigue siendo la persona con la que compartir los buenos momentos y con la que formar el futuro. Y es bonito saber que a pesar de los malos momentos, siempre está esa personita ahí, transmitiéndote paz, transmitiéndote serenidad.
La vida no es fácil, está llena de momentos malos y de estrés, pero todo se hace más llevadero cuando esa personita está ahí esperándote para decirte que "todo va a salir bien".
Y yo tengo suerte, mucha suerte, porque tengo a esa personita que hace que cada día me levante con una sonrisa de oreja a oreja y me anima a luchar por mis sueños. Y visto como va el mundo, tengo que considerarme muy afortunada de encontrarlo entre tanta superficialidad y tantos miedos. Porque aunque parece imposible, todavía existen las historias de amor, esas que superan a las películas y te revolucionan el mundo <3
P.D.: Te la dedico a ti, a mi fiel compañero de aventuras <3